Después de veinticinco años en Bolivia de los cuales los últimos cuatro los ha pasado en Santa Cruz, el Padre Javier Llorente nos deja para regresar a Argentina, concretamente se va a la ciudad de Rosario; para sustituirle en las laborales pastorales del Opus Dei en Santa Cruz y Cochabamba viene el Padre Ignacio un jóven sacerdote que hasta ahora ha estado en el centro de la ciudad de Salta. Sobre la primera quincena de Enero se producirá el cambio.